Pues cogemos la idea de Kick-Ass, al chavalito este de The Boys (¡OJO! que es el hijo de Dennis Quaid, ¿eh? Hay que pagarle bien), que es así graciosete y hace papeles de friki debilucho mierdecilla, y sacamos una peli simpaticona, medio comedia medio acción, con algo de gore, que eso siempre vende, ¿no? ¡Y unos milloncetes pal bolsillo! ¡Ole, ole y ole!”
Algo así debió de ser la reunión de los productores de Novocaine, la mierda que nos ocupa hoy. Porque, efectivamente, estamos ante otro MIERDÓN.

El protagonista es el típico tontito con vida anodina: curra en un banco, juega al LoL con sus colegas por las tardes y se la casca en silencio mientras suelta alguna lagrimilla en la cama (no nos lo muestran, pero todos lo sabemos). Un día se encapricha de una becaria (¿acoso laboral, quizás?) y ahí empieza la aventura de su vida: atracan el banco, se llevan a la chavala de rehén y nuestro héroe decide que es momento de coger una pistola y salir a lo loco con un coche patrulla robado.
Nunca se ha peleado con nadie, pero da igual, porque por arte de magia (y gracias a una condición genética que le impide sentir dolor —sí, como Kick-Ass, o aquel capítulo de House que ya viste hace 15 años) empieza a reventar a los ladrones, que son tan listos como una caja de zapatos mojados.
Y vamos al final directamente: AY, QUE NADA ES LO QUE PARECE. Resulta que la chica también estaba metida en el ajo, pero no, que lo suyo era real, que te quiero, que esto no estaba planeado, que bésame, que blablablá. Tan cliché, tan plano, tan escrito con un generador automático de guiones malos que ni se molestaron en darle una vuelta más.
Entre bromas de mierda, peleas de instituto y giros más predecibles que una siesta en agosto, el prota se carga a los malos, salva a la chica (que era mala, pero luego ya no), y todo termina con final feliz.
Todos felices… menos nosotros, los pobres espectadores.
UN 3 QUE TE COMES, HIJO DE PUTA.
Lo siento. Es que acabo de escribir la reseña de EL CALVO PELEÓN (la tienes en el blog, si te atreves), y ver dos truños de este calibre seguidos me saca el demonio.
Buenas noches, y buena suerte.
Disclaimer: toda la bilis que vierto aqui es siempre desde el respeto, es satira y no apologia. Si yo lo hago por visibilizar. No a la calvofobia ni a la hijoputofilia.